bandoleros del Guadarrama

bandoleros del Guadarrama

Los Caballeros Quiñoneros. La persecución de los bandoleros. Valle del Lozoya.


Alto Valle del Lozoya. Tierra de quiñones y quiñoneros.


           En las últimas entradas hemos fijado nuestra atención en la persecución del bandolerismo que no todo iban a ser cabalgadas, robos sin castigo y admiración popular. Si, la vida del bandolero no debía de ser fácil y seguramente de haber existido entonces esas casas de apuestas que de un tiempo a esta parte han venido proliferando en nuestro país, no se pagaría muy bien su supervivencia.
          Últimamente también nos veníamos alejando un poco del ámbito geográfico de este blog por lo que volvemos a nuestra sierra de Guadarrama, para seguir, eso si, contando cosas sobre la persecución del bandolerismo, centrándonos de momento, en los años medievales.  En los párrafos siguientes vamos a fijar nuestra atención en unos personajes, citados habitualmente en toda artículo, reportaje, o libro que se precie sobre la historia del valle del Lozoya,  pero de los que realmente se sabe bastante poco.  Hablamos de los llamados "Caballeros quiñoneros", unos personajes a medio camino de la historia y de la leyenda citados como repobladores de esta comarca serrana y también  como impartidores de justicia. A estos personajes se les atribuye un supuesto derecho de "horca y cuchillo" y se les relaciona igualmente con dos lugares del valle.  Concretamente con el Puente del Perdón sobre las aguas del Lozoya y con la llamada Casa de la Horca, antigua construcción donde irremediablemente iban a acabar todos los condenados. De que los dichos caballeros aplicaran la reinserción social, ni la historia ni la leyenda dice nada.

             Acerca de  los Caballeros quiñoneros es absolutamente imprescindible traer aquí un famoso y repetido párrafo escrito por el cronista segoviano Diego de Colmenares,  quien en su "Historia de la Insigne Ciudad de Segovia"(1637) contaba lo siguiente acerca de los legendarios capitanes segovianos Día Sanz y Fernán García:


“Fundaron también los quiñones, esto es, cien lanzas de a caballo que divididos en cuatro escuadras de a 25, todos los días de fiesta cuando la ciudad y pueblos asistían a los sacrificios, corriesen la campaña contra los moros, que emboscados en las sierras, aguardaban aquellas horas para sus acometimientos y robos".

Para conocer más sobre este asunto de los Caballeros quiñoneros, la repoblación al sur de la cordillera y general información sobre estos años medievales en la comarca, nada mejor que acercarnos a dos artículos publicados por la historiadora María Asenjo González que llevan por título Los Quiñoneros de Segovia (siglos XIV y XV) y Sociedad urbana y repoblación de las tierras de Segovia, al sur de la sierra de Guadarrama.

Por estas publicaciones sabemos que estos Caballeros quiñoneros fueron, auspiciados por el concejo de Segovia, los encargados de repoblar amplias zonas al sur del Sistema Central en terrenos en hoy en día pertenecen fundamentalmente a la actual provincia de Madrid (aunque lo cierto es que también se extendían por lo que hoy son las provincias de Ávila y Toledo).

Historia de la Insigne ciudad de Segovia. Bestseller de D. Diego de Colmenares (1637)


              Los Caballeros quiñoneros fueron los encargados de encabezar la repoblación de estos lugares seguramente todavía bastante despoblados tras la Reconquista. Pero a diferencia de tiempos pasados,  ya no sería la intención de asegurar estos terrenos frente a una hipotética contraofensiva de los moros lo que movería al concejo de Segovia,  si no más bién el hecho de afirmar su presencia y dominio en unas comarcas muy interesantes para una incipiente industria ganadera. Además era necesario mover ficha, ganar terreno antes de que otros lo hicieran (nobles o concejos vecinos). Lo cierto  es, como nos cuenta Asenjo González, que  unos documentos fechados en 1302 nos enseñan como se ordenó este poblamiento y que requisitos debían de cumplir las gentes que lo llevaban a cabo.
Sobre el carácter social de estos individuos las historiadora dice lo siguiente
“Los caballeros quiñoneros eran considerados el escalón más bajo de la caballería, sobre la que se organizaba la oligarquía segoviana”.
“ (..) Tal circunstancia confirma el carácter de caballería popular que distinguiría a las cuadrillas de quiñoneros a cuyos caballeros se les permitía compatibilizar el uso del título de caballero, con la única exigencia de mantener caballo y armas y al margen del oficio o de la actividad profesional desempeñada, distinguiéndose de los caballeros de linaje, para quienes el oficio de la caballería era exclusivo, no siendo compatible con la condición de propietarios de bienes agropecuarios" 


Puente del Perdón.


        Para convertirse en quiñonero colonizador era necesario cumplir con ciertos requerimientos pero uno sin duda fundamental y que define perfectamente lo que se iba buscando era la necesidad de mantener caballo y armas, lo que por otra parte nos sirve para enlazar con el texto del historiador Diego de Colmenares.
¿Impartían justicia? Pues uno no puede ni  afirmarlo ni negarlo, pero sin duda y teniendo en cuenta en contexto de la época es muy posible que si fuera ejercida, en un tiempo donde se debía de carecer de todo eso que llamamos garantía judicial. ¿Llevarían como dice la leyenda a los  reos al Puente del Perdón y luego a la Casa de la Horca? Ni idea, pero podría ser, por qué no.

Santiago Martín Arribas