Continuamos.
Una noticia recogida en el periódico el Imparcial, en su edición del 6 de junio, se nos muestra pródiga en información, concretamente en los siguientes términos:
“Anoche fue capturado en la casa número 13 de la Glorieta de Quevedo un individuo llamado Delgado Sanz conocido con el apodo del Tuerto de Santo Domingo de Pirón, cuyas continuas fechorías se han hecho tristemente celebres.
Estando condenado a 36 años de presidio por varios e importantes y al ser conducido desde Cartagena a Santoña se fugó de la cárcel de la Cabrera formando con otros malhechores una cuadrilla, que fue durante mucho tiempo el terror de la comarca de Segovia hasta que con dos de sus compañeros cayó en manos de la Guardia Civil, ocupándoles algunos objetos sagrados, armas, caballerías, dinero, 37 ganzúas siendo enviados a la cárcel de Segovia, de donde se fugaron nuevamente el 31 de enero del presente año.
Estando condenado a 36 años de presidio por varios e importantes y al ser conducido desde Cartagena a Santoña se fugó de la cárcel de la Cabrera formando con otros malhechores una cuadrilla, que fue durante mucho tiempo el terror de la comarca de Segovia hasta que con dos de sus compañeros cayó en manos de la Guardia Civil, ocupándoles algunos objetos sagrados, armas, caballerías, dinero, 37 ganzúas siendo enviados a la cárcel de Segovia, de donde se fugaron nuevamente el 31 de enero del presente año.
El 26 de febrero la cuadrilla sostuvo un vivo tiroteo con la Guardia Civil del puesto de Rascafría siendo muerto uno de los criminales y preso otro. Al ser conducido éste a Madrid por una pareja del benemérito cuerpo el Tuerto acompañado de otros 6 forajidos, salió a rescatarle a un punto denominado arroyo de los pinos, resultado en la contienda la muerte del preso. Las autoridades que tenían noticias de estas visitas, estaban sobre la pista del criminal, hasta que anoche dio con el la policía en una taberna de la citada glorieta. Apercibido de la presencia de sus perseguidores, huyó ocultándose en el portal de la casa, donde le capturó el capitán del cuerpo de orden público, D. Agustín Lorenzo Figuereido, Inmediatamente fue conducido a la cárcel de pajes, donde se hallaba reclamado hace mucho tiempo entre otras autoridades por el fiscal militar.
El capitán don Agustín Lorenzo ha prestado un servicio digno de elogio (...) haciéndose digno de la recompensa para que le ha propuesto el señor gobernador en cuanto ha tenido noticia del hecho.
Ahora sólo falta que el criminal no se vuelva a escapar.”
Antigua cárcel de Segovia http://www.panoramio.com/photo/50445189
Desde luego la noticia tiene toda la pinta de la verosimilitud. Un periódico de renombre y una información pródiga en detalles nos hace confiar, casi a pies juntillas, en todo lo que se nos cuenta. Por otro lado también se nos relata algún episodio, como el tiroteo con la Guardia Civil en Rascafría, que habitualmente se cita al hablar de las vicisitudes del bandolero segoviano. No vamos a entrar ahora en este asunto concreto ni en otras informaciones que nos aporta la detallada lectura de la la noticia. Lo dejamos para otra ocasión.
Y, efectivamente, esta será la captura definitiva del bandolero segoviano. Al menos eso creemos. Los biógrafos que se han acercado a su figura, nos cuentan que preso en la cárcel de Segovia todavía intentó otra escapada más. Pero la buena suerte que otras veces le había acompañado esta vez ya no lo hará. Conseguida la huida del recinto carcelario una vez más, en su camino a la sierra, el Tuerto y sus compinches son fácilmente capturados a las pocas horas. Una inconveniente nevada echará por traste la fuga. Los perseguidores no tendrán más que seguir las huellas para dar con unos ateridos huidos. El bandolero no volverá a conocer la libertad nunca más.
